Erik Satie al unísono

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- Fue uno de los compositores franceses marcadamente surrealista

1. Sul Ponticello, de la redacción de la Revista on-line de Conservatorio Virtual No.2, escribió en mayo 2004 que Erik Satie (1866-1925) fue un compositor de rupturas.

2. En efecto, “su obra huye de la complejidad de la música de su tiempo y avanza en el uso de ciertos recursos armónicos, marcando en parte la tendencia futura de la música francesa.”

3. Ponticello asegura que Satie estuvo influido en sus obras por los principios dadaístas y surrealistas de su tiempo, y fue el principal punto de referencia del grupo conocido como Le Six -formado por Honegger, Milhaud, Poulenc, Tailleferre, Auric y Durey-, a quienes conoció a través de Jean Cocteau.

4. “La Deuxième Gymnopédie data -como las otras dos- de 1888, y fue compuesta por Satie a partir de una línea melódica fluida y carente de desarrollo. La simplicidad del dibujo melódico y la armonía semi-disonante, que permanece estática a lo largo de toda la pieza, confieren una austeridad formal, rítmica y expresiva que reacciona de manera abrupta contra los excesos del último romanticismo”.

5. La edición de Erik Satie que se puede descargar está en PDF y MIDI. Es la primera pieza de esta serie pianística emblemática, de “uno de los compositores franceses más personales.”

Un tic surrealista

6. “Satie ha dicho que el piano, ‘como el dinero, no resulta agradable más que a quien lo toca’: eso tranquiliza a alguien como yo, malquistado de nacimiento con la música instrumental. Eso hace también que lamente haber comprendido demasiado tarde, después de su muerte, al individuo excepcional que fue y al que un telón de espinas -su malicia, sus estudiados tics- me ocultaba... El tránsito del siglo XIX al XX no ha producido ninguna evolución de espíritu tan fascinante como la suya. Tendida entre dos puntos extremos, los místicos y Platón, durante treinta años la fatalidad del espíritu moderno ha consistido en hacer vibrar la cuerda de Satie al unísono con las de su compatriota Alphonse Allais y, más aún, de Alfred Jarry. No conozco mayor escuela de libertad con respecto a todas las convenciones, ni otra sonrisa más traviesa y, a la postre, tan punzante por encima del abismo interior, de negrísima especie, del que se escapa la bandada de sus dibujos e inscripciones caligrafiadas en absoluta soledad –‘todo de fundición’, a la vez tan graciosos y tan inquietantes-, que esperan desde hace tiempo un inventario completo y un análisis riguroso.”
(André Breton, 1955)

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The Erik Satie Internet MIDI Archive:
http://www.teledyn.com/fun/ErikSatie/